INFORME COTEC
Ejecución presupuestaria de la I+D en el sector público (2022)
Análisis de la Política 46 I+D+I+d realizado por la Fundación Cotec a partir de los últimos datos publicados por la Intervención General del Estado (IGAE).
El sector público estatal español dispuso en 2022 del mayor presupuesto de la historia para Investigación, Desarrollo, Innovación y Digitalización (I+D+I+d), con un total de 15.044 millones de euros (2.285 más que el año previo). El incremento fue, no obstante, significativamente inferior al registrado en 2021 (4.097), primer año de entrada de los fondos comunitarios Next Generation EU. En cuanto a la tasa de ejecución, el porcentaje de presupuesto que efectivamente se invierte, se situó en el 58,7% (8.824 millones de euros), superando el anterior máximo de ejecución en términos nominales, el de 2009 (8.476).
La mayoría del presupuesto para I+D+I+d disponible en 2022 correspondió a fondos nacionales (9.309 millones de euros), pero casi el 40% (5.735) provino de fondos europeos, del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR). El análisis de Cotec recuerda que, aunque el presupuesto dedicado a esta política venía aumentando desde 2017, no fue hasta 2021 cuando se hizo más pronunciado, precisamente por la incorporación de los fondos europeos.
El análisis desglosa estos datos agregados, diferenciando, por su distinta naturaleza y evolución, entre gasto no financiero (capítulos del 1 al 7, como pueden ser subvenciones o costes de personal, entre otros) y gasto financiero (capítulo 8, como pueden ser créditos). La incorporación de fondos europeos ha supuesto un cambio importante en la composición del presupuesto de la Política de gasto 46 que, desde 2021, pivota mayoritariamente sobre el gasto no financiero.
En todo caso, como es habitual, la tasa de ejecución presupuestaria del gasto no financiero (76,4%) es muy superior a la del gasto financiero (32,2%), aunque la primera empeora 4,4 puntos porcentuales en el último año, mientras que la segunda mejora 6. El gasto no financiero registra la tasa de ejecución más baja de la serie histórica, el gasto financiero presenta la mejor desde 2015.
Entre los recursos disponibles en 2022 para I+D+I+d que finalmente no se emplearon (un total de 6.220 millones de euros), casi siete de cada diez corresponden a gasto financiero (4.090 millones de euros) y tan solo tres de cada diez corresponden a gasto no financiero (2.130 millones de euros).
Todos los recursos financieros no empleados corresponden a fondos nacionales, mientras que la mayoría del gasto no financiero no ejecutado son fondos europeos (1.700 de los 2.130 millones de euros). Estos recursos no se pierden, puesto que la normativa comunitaria permite que los fondos europeos no ejecutados en 2022 puedan ejecutarse en posteriores ejercicios.
DISTRIBUCIÓN DE LOS RECURSOS NO EJECUTADOS
En cuanto a la distribución de los recursos no ejecutados por agentes, los ministerios de Asuntos Económicos y Transformación Digital; de Industria, Comercio y Turismo; además del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Agencia Estatal de Investigación (AEI), concentran la mayor parte de la inejecución del gasto no financiero. Por su parte, los ministerios de Ciencia e Innovación, y, de nuevo, el de Industria, protagonizan la del gasto financiero.
Respecto al desglose del gasto no financiero por capítulos, el grueso de la no ejecución se concentra en inversiones reales (1.009 millones de euros) y en transferencias de capital (991). En tercer lugar, no se ejecutaron 97 millones del capítulo de gastos de personal, la gran mayoría de los cuales (70 millones de euros) corresponden al CSIC.
Cotec ha consultado sobre esta última cuestión al Ministerio de Ciencia e Innovación. La respuesta ha sido que el CSIC no ha remitido todavía los datos definitivos de liquidación del ejercicio a la IGAE, de modo que la cifra final de no ejecución del capítulo de gastos de personal será inferior (en torno a 50 millones de euros). Se corresponde con una previsión de estabilización de personal por 30 millones de euros que no se llegó a ejecutar (y que se prevé ejecutar en 2023), además de otros 20 millones de euros no ejecutados previstos para la incorporación de escalas científicas (que también se prevé ejecutar en 2023).
El Ministerio de Ciencia e Innovación -junto con el de Universidades- presentó la mejor tasa de ejecución presupuestaria de los fondos europeos dedicados a la Política de gasto 46 (del 100%, implementó la totalidad de los 696 millones de euros de gasto no financiero europeo presupuestados para 2022). Sin embargo, su tasa de ejecución agregada quedó muy deslucida (cae hasta el 44%), una vez considerados también los fondos de origen nacional (deja de ejecutar 27 millones de euros de gasto no financiero y, sobre todo, 2.282 del capítulo financiero).
Los fondos europeos están detrás del gran salto que la financiación pública a la I+D+I+d experimenta desde 2020. Los fondos realmente ejecutados pasan de 3.055 millones de euros en 2020 a 8.825 en 2022 (5.770 de aumento). El 70% de estos recursos ejecutados adicionales (4.035 millones de euros) provienen precisamente de los fondos europeos, mientras que el incremento de fondos nacionales en este periodo ha sido mucho más moderado (904 de recursos financieros y 831 de recursos no financieros).
El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital es el principal gestor de fondos europeos de la Política de gasto 46, específicamente de los dedicados a digitalización, y presenta una tasa de ejecución del 75% (dejó sin ejecutar 832 millones). El principal programa que administra es la dotación de 1.388 millones de euros para el Kit Digital, con una tasa de ejecución del 100%. Cuando se incorporan los fondos de origen nacional, la tasa de ejecución agregada se situó en el 73% (dejó sin ejecutar otros 871 millones de gasto no financiero y 178 del capítulo financiero).
El análisis de Cotec advierte de que ha sido necesario esperar 13 años -y disponer de fondos europeos- para que España consiga superar los anteriores niveles máximos de recursos presupuestados y ejecutados, alcanzados en 2009.
FUTURO INCIERTO PARA LA FINANCIACIÓN PÚBLICA DE LA I+D+I+D
La Fundación advierte además de que “los fondos comunitarios estarán disponibles durante un periodo limitado de tiempo, de modo que será necesario reemplazarlos por otros de origen nacional si se quiere dar cumplimiento tanto al compromiso de la Ley de la Ciencia de seguir incrementando la financiación pública de la I+D+i en el medio plazo, como a los objetivos de la Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación de converger con Europa en I+D+i”.
En este contexto, la actualización del Programa de Estabilidad 2022-2025, recientemente presentado por España a la Comisión Europea, genera dudas importantes. En realidad, España prevé destinar en 2025 a las actuaciones de carácter económico (entre ellas, la política de gasto 46) una fracción de su PIB incluso menor que antes de la pandemia, por lo que no parece que se vaya a poder contar con recursos públicos adicionales suficientes para sustituir los fondos europeos.
Después del verano, Cotec, en colaboración con el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), publicará un nuevo análisis exhaustivo caracterizando a los destinatarios (a escala territorial y con carácter sectorial) de los fondos europeos destinados a la Política de gasto 46. Este nuevo análisis partirá del estudio detallado tanto de las licitaciones como de las subvenciones concedidas en los ejercicios 2021 y 2022.
Anexo: Ejecución presupuestaria de la I+D+I+d en el sector público
Cotec